Enormes naves que fueron bodegas de Tabacos Mexicanos (Tabamex) se encuentran en ruinas por total abandono, derivado de la disputa de dos organizaciones campesinas que ahora se adjudican la propiedad.
En la década de los 70 y 80 floreció el cultivo de tabaco en esta región y los productores estaban agrupados en La Unión de Ejidos Pantepec (UEP), filial del Movimiento Nacional de los 400 Pueblos, y en Tabacos de Álamo Sociedad de Solidaridad Social, llamada Triple “S”.
Pero en 1990 desapareció Tabamex y las dos grandes bodegas quedaron en manos del Gobierno Federal, siendo transferidas a las dos organizaciones campesinas, con acuerdo de pago de 20 mil millones de pesos de aquellos tiempos durante 10 años a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP).
Una de las bodegas está sobre la calle Palafox, recién pavimentada y que conecta desde el ejido La Unión hacia la carretera federal, y la otra en pleno centro de la ciudad, sobre la parte norte de la avenida Independencia.
Cada agrupación recibió el 50% de los espacios de ambas naves, con el convenio de que la Triple “S” y la UEP cubrieran cada año mil millones de pesos, hasta saladar, cada una, 10 mil millones con las ventas de producto a las cigarreras La Moderna y Cigatam.
Para ello se dejó de sembrar tabaco oscuro para mezcla y se incursionó en el cultivo del tabaco burley rubio o claro, que era el requerido, pero no se aclimató y no cumplía la calidad, por lo que La Moderna y Cigatam dejaron de comprar, con lo que sobrevino la debacle del llamado “Oro café”.
Desde entonces aparentemente la SHyCP se ha “olvidado” de los cobros, en tanto sigue la disputa de las dos organizaciones, con lo que las estructuras son ahora elefantes blancos, sin indicios de que puedan ser rescatados.