En su paso por México, migrantes no dejan de sufrir violencia

Durante el arranque de este 2018 el tránsito de migrantes centroamericanos por la zona sur del país y el estado de Veracruz no cesa, al igual que las denuncias de violencia durante su travesía.

En una visita a la Casa del Migrante, ubicada en la colonia Coatzacoalcos, en este municipio, se pudo platicar con un joven de 19 años que el pasado 4 de enero salió de Colón, Honduras, en busca de conquistar el sueño americano.

Dijo llamarse Carlos Armando y narró que durante su viaje le han sucedido cosas buenas y malas, entre éstas el asalto que sufrió en un sitio denominado “Salto de Agua”, presuntamente en el estado de Chiapas.



“Nos asaltaron, nos dejaron hasta sin zapatos, fue delante de Salto de Agua, en Chiapas; un lugar al que le dicen 'La cementera'. Salieron unos chavalitos ahí y nos pusieron pecho a tierra, se ve que eran mexicanos por el acento, nos quitaron los zapatos, la ropa que traíamos, dinero, teléfono... hemos llegado hasta acá con el apoyo de los ciudadanos”, dijo.

Con zapatos rotos y un suéter que le fue regalado, dijo que aunque anhela llegar a Estados Unidos, con llegar a Tijuana se conforma para poder conseguir un empleo y así mandar sustento a su casa.

Allá en Honduras tuvo que dejar a sus padres y hermanos, pues explicó que la situación económica y de inseguridad no permite que los jóvenes se desarrollen.



Dejó claro que pese a la situación de violencia que se vive en México y sobre todo en el sur, no teme seguir su viaje y confirmó que en los últimos días el tren ha pasado por el lugar “cargado” de sus connacionales.

Asimismo, en el refugio se pudo hallar a una familia con un menor de edad de escasos 7 años, además de otros viajeros solitarios menores de 18 años.

También se constató la presencia de personal del ACNUR y de Vectores, realizando trabajos a favor de los viajeros, quienes confirmaron que este mismo miércoles partirían hacía Tierra Blanca.