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Sección: Estado de Veracruz

Libertas

La educación es esencia del desarrollo social

José Manuel Velasco Toro 08/08/2018

alcalorpolitico.com

Al observar el movimiento civilizatorio a lo largo de la historia apreciamos un rasgo común en toda cultura, en toda civilización de todos los tiempos: la educación, flujo de aprendizaje que trasmite prácticas, conocimientos, habilidades, experiencias, valores éticos que permean a la sociedad, la economía, la política, pero, sobre todo, el sentido de vida. En el antiguo Egipto, en las culturas ancestrales de América, África y Oriente, en la Europa occidental y oriental, en fin, en cada espacio, en cada época, en cada grupo humano desde su organización de base tribal hasta la elevación de imperios y formación de naciones, la educación ha sido, y será siempre, elemento esencial que provee a toda sociedad de los fundamentos creativos que son impulsores del desarrollo y la productividad.

Actualmente en México tenemos una cobertura en educación básica de poco más del 95%. Un logro importante cuando en 1917 el 75% de la población era analfabeta. Sin embargo, pese la cobertura formadora y el logro de contar con una infraestructura escolar a la que asisten millones de niñas, niños y jóvenes, el actual resultado educativo es de un bajo perfil en conocimientos y habilidades requeridos para la vida, el aprendizaje para continuar en niveles posteriores de estudio y en destrezas para desenvolverse en el mundo laboral cada vez más diversificado, complejo y demandante de sentido creativo.

Nuestro sistema educativo fue eficiente en el pasado porque estaba en correspondencia con la dinámica social de entonces. Sin embargo, hoy esa correspondencia no existe, razón por la cual nos enfrentamos al desafío de superar el bajo perfil de aprendizaje para lograr niveles de calidad educativa que respondan a las exigencias de una sociedad global inmersa en el conocimiento y la innovación tecnológica. La educación es fundamental para el logro de un impulso social equitativo porque dota a las personas de las habilidades suficientes para aprender, conocer y aplicar su saber en la vida cotidiana y en la realidad social vivida. Pero no es sólo adquirir conocimientos para labrar habilidades, sino se trata del cultivo de nuestra personalidad. Por eso, el desarrollo humano integral para el progreso económico sustentable y equitativo, debe estar en relación inherente con el acto educativo.



Empero, para que la educación responda al cambio de la dinámica social y económica del mundo actual y de la sociedad en equidad que queremos, es necesario su impostergable transformación hacia una educación que estimule al alumno a aprender con autonomía creando ambientes de aprendizaje emocionales e intelectualmente creativos, sanos en todo sentido, lo que le permitirá construir cimientos sólidos para seguir aprendiendo a lo largo de toda su vida. Seis dimensiones relacionales (algunas de las cuales ya se iniciaron, pero deben reorientarse con sentido de respeto a la dignidad humana) son constitutivas en toda acción transformadora de la educación básica, las que desde luego deben asumirse con continuidad prospectiva y voluntad política: 1) La reeducación del educador que debe partir del respeto a su importante rol social e impulsar una realista y adecuada estrategia reeducativa. 2) Elevar el nivel de aprendizaje y habilidades intelectuales y operativas lo que significa alinear el currículo para hacerlo corresponder con perfiles satisfactorios en lenguaje y escritura, cultura científica y humanística, pensamiento lógico-matemático, desarrollo de la empatía social para la colaboración y participación. 3) Superar la desigualdad e inequidad en cobertura escolar e infraestructura educativa lo que representa invertir en instalaciones físicas, pero, sobre todo, en recursos digitales con programas educativos, libros actualizados y laboratorios. 4) Acelerar la cultura de equidad y género en aprendizaje, habilidades intelectuales, operativas y de participación colaborativa. 5) Fomentar habilidades ciudadanas de orden cívico y social en el conocer, hacer y pensar reflexivamente nuestras leyes en el respeto a los derechos humanos, ciudadanos y obligaciones implicadas. 6) Estimular la cultura ecológica para reaprender a vivir en armonía con la naturaleza y construir entornos sustentables para la vida. Dimensiones que la política educativa debe priorizar para la educación de la primera infancia, preescolar, primaria y secundaria. Tramo que sustenta la personalidad que nos caracterizará en el ser adulto. De ahí que sea un asunto que no se debe tomar a la ligera porque en ello se juega buena parte del futuro de México.