Ir a Menú

Ir a Contenido

Sección: Estado de Veracruz

Las Instituciones discriminan la música tradicional mexicana: Laura Marina Rebolloso

Junto con el “Ensamble Marinero”, presenta el 4 de febrero a las 20:30 horas, su producción discográfica “Cascabel en mis venas”

Sabino Cruz V. Xalapa, Ver. 27/01/2012

alcalorpolitico.com


Click para ver fotos
La compositora e intérprete de música tradicional veracruzana Laura Marina Rebolloso Cuéllar, acompañada por el “Ensamble Marinero”, presenta el próximo sábado 4, a las 20:30 horas, su más reciente producción discográfica titulada “Cascabel en mis venas”, producida por el sello discográfico Round Whirled Records (RWR), en la que combina modernidad y tradición de sonidos generados por jarana, requinto, leona, piano, guitarra, bajo y tarima.

Para alcalorpolitico.com “la veterana música y cantante” señala que desafortunadamente las instituciones le ponen poca atención a la música tradicional mexicana, tanto desde el aspecto académico como escénico, lo cual se refleja en la ausencia de alguna materia que aborde la “afinación e historia de la jarana o apoyo a grupos en los festivales nacionales e internacionales, ¡nada! La educación es euro centrista”.

Toma de ejemplo la residencia que recién hizo en la Universidad de Washington donde pudo ver un salón que tiene jaranas de todos tamaños, de lo mejor que hay en Veracruz. Aclara que cuando hace referencia a “lo mejor” no está hablando de un estereotipo, es decir a una jarana con los mejores barnices, sino eran jaranas hechas por constructores de jaranas de tradición, de la Cuenca o de los Tuxtlas.

“Ahí te encuentras con investigadores que recorren frecuentemente la región, conviven con los músicos y saben distinguir la diferencia entre un son jarocho y todo lo que sucede en los fandangos. Compran muy buenos instrumentos e incluso la quijada de burro la puedes encontrar ahí, así como Leonas, que es como un guitarrón y que tocan mucho en zona Popoluca, en Acayucan, Cosoleacaque y Jáltipan”.

Por desgracia en Veracruz no se estudia la historia de la música popular o tradicional, como tampoco se da una clase para saber cómo se afina una jarana, de dónde viene; se toma como si eso fueran “tacos callejeros” pues acá sólo comemos caviar y de repente vas al extranjero y lo chistoso es que te encuentras en Stamford, New York, USLA, a gente que está haciendo tesis de maestría o doctorado sobre el fenómeno del son jarocho. Tanto que su jefe de la universidad en Washington da conferencias por todo el mundo sobre la música veracruzana, puntualiza.

No solamente en un plan de estudio de una universidad donde pasa esto, también nos lo encontramos, acotó, en otras áreas como la arqueología, con los recursos naturales, con los productos veracruzanos, que si bien cuentan con apoyos, pero al final son los otros los que les dan más importancia: “creo que hace falta revalorar las cosas buenas que tenemos en Veracruz”.

Sobre el disco comenta que la presentación en la ciudad de México estuvo organizada por el Fideicomiso del Centro Histórico. Se hizo la presentación en la Calle Regina por Arturo Márquez, compositor; Guillermo Contreras, investigador sobre la música mexicana e Inti Muñoz, director del Fideicomiso; pero que el año pasado no pudo presentarlo en Veracruz porque no quisieron dar apoyo ni para los viáticos, mientras se gastaron fuertes sumas por traer a Celso Piña, para la Candelaria. Y a la gente que lleva años tocando ahí, la gente del campo a lo mucho les dan un tamal.

En relación a la gestación del disco, regresa sus recuerdos veinte años atrás cuando llega al estado de Veracruz, en busca de su música popular, tradicional, pero en particular por el Son Jarocho. Por los timbres de los instrumentos, las figuras y todas las formas musicales mestizas con mucha belleza que tienen toda la raíz europea, africana e indígena juntas.

Ex integrante del grupo Son de Madera, aprendió las formas tradicionales del son. En 1994, durante el Festival Afro caribeño tocó al lado de Guillermo Cházaro Lagos, con el “Tío Costilla” y Mariano Martínez Franco, entre otros. Becaria actualmente de la Sociedad de Autores y Compositores, Fundado en la ciudad de Xalapa en 2006 y con un promedio de edad de entre 30 y 40 años, el Ensamble Marinero está integrado por Alonso Blanco, piano, egresado de la Facultad de Música UV; Ulises Martínez, violín, egresado del Conservatorio Nacional de Música; Anastasia Guzmán, ex alumna de Marco Anguiano; y Óscar Terán, contrabajo, egresado de la Facultad de Música UV.

Para finalizar, hizo un llamado para que revaloremos nuestro patrimonio cultural, pues este no sólo nos da riqueza, también fortalece la identidad de un pueblo y cohesiona la comunidad.