México enfrenta crisis de derechos humanos; se criminaliza la inconformidad y la protesta social

Nuestro país enfrenta una crisis de derechos humanos, el cual se está ahondando con la criminalización de la inconformidad y la protesta social por parte del Estado Mexicano, advirtió Moisés Reyes Fausto, secretario general de la Central Campesina Cardenista.

En entrevista, el dirigente campesino señaló que los últimos acontecimientos demuestran que los anuncios hechos por el Gobierno desde hace algunos meses son patentes y un claro ejemplo de esto es lo sucedido en Ayotzinapa, Guerrero, con la desaparición de 43 normalistas, “nos demuestra como un mensaje a quien se oponga y proteste se atenga a las consecuencias”.

Ante esta situación,

el líder agrario indicó que en la pasada Convención Nacional Indígena y Campesina, realizada en octubre pasado en la ciudad de México, uno de los ejes que se atenderán será el relacionado con el tema de reforzar la defensa de los derechos humanos.

Mencionó que la parte más débil de la violación de los derechos humanos está en el campo, está con los campesinos y los indígenas y ahí se requiere reforzar este tema.

Este es uno de los temas coyunturales de la Convención Nacional (Indígena y Campesina), “porque lo que vamos a enfrentar en los próximos meses y años en la defensa del territorio será eso: una constante violación a los derechos humanos de las comunidades indígenas y de los campesinos al enfrentar a los consorcios nacionales que inclusive amenazan con traer sus propias guardias privadas”, alertó.



Otro eje al que se dará también atención, se relaciona con el tema de la soberanía alimentaria, que es diferente a la seguridad alimentaria, en donde se necesita impulsar sistemas de producción para garantizar que haya abasto para el consumo humano y que tenemos que garantizar que en el tema de granos básicos se defina una estrategia de acopio, de tal manera que el país pueda tener reservas estratégicas de granos.

Además, se tiene que impulsar la actividad de las unidades de producción del país, toda vez que hay alrededor de 400 mil de ellas que están improductivas “porque no tienen financiamiento, porque no tienen apoyos y porque están excluidos de los programas públicos del campo”.

Reyes Fausto mencionó que además se requiere impulsar el tema de la agricultura campesina y familiar, porque lo que necesitamos garantizar en el país, es que la gente tenga que comer, es decir, que haya para el autoconsumo, independientemente de la atención al mercado, pero lo que requiere la gente es producir para consumir, porque si no garantizamos nosotros que la gente produzca lo que se consume, vamos a entrar en una crisis profunda, porque la gente va a tener que llevar sus alimentos de donde sea y como sea.



Todas estas cuestiones, dijo por último, se propondrán para que sean considerados en los planteamientos que se harán cuando se discuta la reforma al campo, en donde se deben atender estos aspectos que afectan directamente al sector campesino del país.