Necesario garantizar la reducción de las emisiones de gas metano: Mario Molina

Conforme México transforma el sector energético y crea nuevos gaseoductos, el Premio Nobel de Química, Mario Molina Pasquel y Henríquez, manifestó que “ahora es el momento de garantizar la reducción de las emisiones de metano generadas por la industria del petróleo y gas”.

“Si esto no sucede, entonces el sector crecerá, al igual que las emisiones de metano, lo cual podría minar la capacidad de México para cumplir sus objetivos climáticos. Podemos trabajar en toda América del Norte para demostrar liderazgo y garantizar que se lleven a cabo estas reducciones”, afirmó el Dr. Mario Molina.

En la presentación del análisis independiente, realizado por la empresa de investigación en energía ICF International, estimó que México puede reducir más de la mitad de las emisiones de metano producidas por la industria de gas natural y petróleo por un equivalente de menos de un peso por tonelada de dióxido de carbono.



El estudio menciona que existen 100 categorías de emisiones de gas metano en la industria del petróleo y gas, y que 21 de ellas representan más del 80% de las emisiones estimadas para 2020.

Por ende, precisó, “la reducción de emisiones generadas por estas fuentes de emisión ofrece la oportunidad de hacer mayores reducciones generales”.

Para llevar a cabo el estudio, se recopilaron datos de diferentes organismos gubernamentales, tales como la Secretaría de Energía (SENER), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y Petróleos Mexicanos (PEMEX).



La investigación se realizó bajo encargo del Environmental Defense Fund (EDF), una organización internacional sin fines de lucro, y el informe se publicó en colaboración con el Centro Mario Molina, dirigido por el científico mexicano ganador del Premio Nobel de Química.

Más adelante, expresó que “un gran porcentaje del total de las emisiones de metano en México provienen del sector del petróleo y gas”.

ICF consideró que “México tiene un gran potencial para reducir dichas emisiones si las empresas de petróleo y gas utilizan medidas actuales, sencillas y económicas, como son el incremento del uso de quemadores, válvulas de baja emisión y equipo de monitoreo, para controlar las emisiones de metano”.



Aclaró, “los costos de estas reducciones son bajos, sumando menos de un centavo por cada mil pies cúbicos de gas producido. En algunos casos, la rentabilidad es tan alta que, con el tiempo, los controles se pagan solos a través de la venta del gas natural capturado”.

Resaltó, “el metano es el principal componente del gas natural, y cuando escapa de los pozos, oleoductos u otro equipo de producción de petróleo y gas natural, se pierde un recurso que, de otro modo, se podría vender”.

“El metano es un gas de efecto invernadero significativamente más potente en absorber calor en la atmósfera que el dióxido de carbono, por lo que intensifica rápidamente los patrones de calentamiento a corto plazo”, acotó.



Asimismo, ICF informó que también “se puede lograr una reducción de los contaminantes convencionales, sin costo adicional, junto con las emisiones de metano que surgen de la producción de gas y petróleo, mismas que pueden dañar la salud pública y el medio ambiente”.

“Las políticas ambientales efectivas deben incluir estrategias que den prioridad a la reducción tanto de dióxido de carbono como de los gases de efecto invernadero de vida corta, como el metano”, comentó el Dr. Mario Molina.

“Lo que sabemos acerca del comportamiento del metano en la atmósfera hace de este un asunto urgente, y su solución puede ayudar a reducir el impacto de estas emisiones que contribuyen al calentamiento global”, dijo.



Señaló que “el Gobierno federal se ha comprometido a reducir las emisiones de metano como parte de las Contribuciones Previstas y Determinadas a Nivel Nacional presentadas ante la Conferencia sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas, las cuales tienen como objetivo la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero en un 25% para 2030”.

ENORME POTENCIAL

Por ello, Gerente Senior en EDF, Drew Nelson, expresó que “este análisis demuestra que México tiene un enorme potencial para continuar su liderazgo en importantes temas climáticos, y que puede fijar como objetivo alcanzable la reducción del 55% de metano producido por el sector del gas y el petróleo, con el respaldo de reglamentos y políticas correspondientes”.



“Dentro del informe de ICF, el mensaje más importante para México es que existen grandes oportunidades para disminuir la producción de las emisiones generadas por el sector del gas y el petróleo, y que los costos por lograr un avance climático significativo son bajos”, apuntó.

“La reforma energética, aprobada en diciembre de 2013 por el gobierno federal de México, representa dos oportunidades históricas para el país. Por un lado, como han señalado las autoridades mexicanas, esta reforma fortalecerá y modernizará la industria energética y las empresas estatales productivas. Por otro lado, es el momento justo para que México evite grandes consecuencias ambientales a través de la participación del sector privado en la industria”, concluyó.