No basta pedir perdón, hay que reparar daños: Diócesis de Orizaba

El vocero de la Diócesis de Orizaba, sacerdote Helkyn Enríquez Báez, indicó que toda persona que se arrepienta de alguna situación que haya cometido, no sólo debe pedir perdón sino también reparar el daño.

Indicó que independientemente de su situación de pecado, de la marginación que haya sufrido, de su estado, si se deja encontrar por Cristo, esto puede generar un cambio. Añadió que no importa el tipo de pecado que tenga, no importa la concepción que la sociedad tenga de esta.



"Un cristiano convertido no solamente debe reparar el daño que ha ocasionado, sino también buscar el bien de su propia comunidad; no basta sólo el perdón sino también reparar el daño".

Destacó que en la Sagrada Escritura, en el libro de Lucas habla acerca de Zaqueo un publicano que su corazón fue transformado, pero que por su propio oficio en su momento era repudiado por los mismos israelitas, pues era considerado su oficio como ser traidor al pueblo y servir al imperio.

"Este relato simboliza la actitud de Dios para con el pecador. Dios que no margina, no repudia, no excluye, no descarta, sino que se digna a mirar al pecador en su propia miseria, en sus propios límites".