No hay crecimiento económico en el Estado: Economista de la UV

Aun cuando la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario (SEDECOP) presumió que la entidad presenta un crecimiento en Inversión Extranjera Directa (IED) del 46 por ciento en el primer trimestre de 2019, el economista de la Universidad Veracruzana (UV), Rafael Arias Hernández, consideró que esto no se observa en términos reales, pero además las cifras que se dan a conocer podrían resultar exageradas, dado que no existe un diagnóstico del cual partir para hacer dichas aseveraciones.

En medio de la salida de Ernesto Pérez Astorga de esa dependencia y a poco menos de seis meses de arrancado el gobierno morenista, el investigador resaltó que en el estado de Veracruz, en términos financieros, no se observa un gran avance, aunque consideró que se requiere más tiempo para hacer un análisis de los primeros resultados.

Dijo que el problema central es que los funcionarios no han hecho un diagnóstico del cual partir, “entonces se confunde la inercia del pasado que sobrepasa los primeros meses y aplasta o se hace presente porque es imposible que de la noche a la mañana se resuelven los problemas”.



Aseguró que al no hacer un diagnóstico empiezan las exageraciones y las informaciones rápidas.

Aunque reconoció el viraje en favor de las mayorías, es decir dar atención millones de ancianos, a discapacitados a jóvenes y niños para que tengan el mínimo de motivación, expuso que el problema no sólo es gasto sino la fortaleza económica.



"Es decir saber de dónde se van a obtener los recursos y es ahí donde la política fiscal y de fortalecimiento económico tiene que mostrar capacidades de acuerdo a las nuevas circunstancias, en un escenario que ahora es más competido".

“Esto no se va a resolver con formulitas del pasado, sino que se tienen que ver los contextos y propuestas actualizadas”, puntualizó.

En relación al aparente ocultamiento de información con respecto de la compra de patrullas para el uso de las fuerzas de seguridad hecha por el Gobierno del Estado dijo que les recordaría que la Cuarta Transformación empezó con tres principios muy sencillos: “No robar, no mentir y no traicionar”.



Hizo hincapié en que más allá de eso, los servidores públicos tienen la obligación de cumplir y hacer cumplir la ley.

“Lo que más se visualiza es cuáles van a ser los funcionarios de esta administración que primero van a ir a parar la cárcel” y es que explicó que están pensando que la ciudadanía va a asumir una actitud de simulación, de desinterés y pasividad.

No obstante lo que se ve es una movilización y una presencia de una evaluación ciudadana más activa, es decir “creen que con distractores se van a olvidar estos temas, pero ya hay ciudadanos pensando en presentar las denuncias correspondientes para que los persiga la ley”.



Dijo que hay muchos servidores públicos que desconocen cuáles son sus obligaciones y ni siquiera han leído la nueva Ley de Responsabilidades recientemente aprobada, que convierte comportamientos en delitos graves, como es el caso de la corrupción.

En general, los funcionarios tienen que entender que están “para servir y no servirse”, y uno de los aspectos obligados e ineludibles es la transparencia y acceso a la información pública.

“Es decir que hemos confundido el derecho a saber con la obligación de información, es decir todos los ciudadanos estamos en el derecho de preguntar lo que queramos saber y el servidor público está obligado a informar, lo lea o no lo lea la población”, anotó finalmente.