Personal médico del Hospital Regional de Río Blanco (HRRB) dio a conocer que existe inconformidad porque el Hospital General de Córdoba está rechazando los envíos de pacientes, cuando este nosocomio está saturado ya por los pacientes de COVID-19.
Explicaron que en el área de Urgencias se adaptó un espacio con 20 camas para pacientes COVID-19, además de que se conoce que está por habilitarse el tercer piso, pero con los casos que están recibiendo se estima que no tardará en dejar de ser un nosocomio híbrido para reconvertirse a COVID.
Pero mientras, ellos lidian con la atención a estos enfermos, del HGC están regresando a las personas con otras enfermedades, con lo que además los ponen en riesgo.
Comentaron que recientemente regresaron a personas con coledocolitiasis (cálculos en los conductos biliares) que requerían intervención quirúrgica, con diálisis y de TB/VIH (con VIH que también tiene tuberculosis).
Señalaron que el acuerdo era que debido al número de casos COVID que hay, el Hospital General de Córdoba, antes Yanga, atendería casos de cirugías y otros, pero no se ha respetado ese acuerdo.
Indicaron que decidieron hacer pública su inconformidad pues plantearon el problema al director del hospital, pero este les dijo que el secretario de Salud, Roberto Ramos, dio la orden de abrir más espacios para pacientes con coronavirus pero seguir atendiendo a los de enfermedades comunes, lo cual no saben cómo se hará pues ya no hay capacidad.