Enojo, quejas y reclamos fueron la imperante en las casillas especiales instaladas en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río-Medellín de Bravo.
Los momentos más graves se dieron en el Palacio Municipal de Boca del Río, donde un grupo de personas quiso obligar a los funcionarios de casillas a dejarlos votar cuando las boletas estaban agotadas.
Aunque eran decenas de ciudadanos los que estaban formados, las protestas fueron azuzadas por al menos tres hombres maduros, quienes no entendían de razones.
Incluso, al ver que no los dejarían sufragar porque no había boletas para Presidente, empezaron a gritar: "¡Fraude!", pues alegaban que anularon boletas que todavía no eran usadas para la elección de Gobernador.
Lo mismo pasó en la casilla especial colocada en Plaza Mocambo, en donde los ciudadanos estuvieron hasta cinco horas esperando para votar.
Pese a las quejas y hasta mentadas, por fin, funcionarios del Instituto Nacional Electoral (INE) llegaron y explicaron que los votantes sí lo podían hacer, según alcanzaran las boletas que quedaran.