Se volcó la fe de los católicos en Xalapa al recibir las reliquias de Juan Pablo II

La fe y el amor que los católicos xalapeños profesan por el beato Juan Pablo II, provocó que miles de personas llegaran desde temprana hora a la Catedral de Xalapa para hacer largas filas con el propósito de venerar sus reliquias.

Antes de las 8:00 de la mañana arribó el convoy que las transporta durante su recorrido por territorio nacional, justo frente al Colegio Motolinia donde el arzobispo, Hipólito Reyes Larios, las recibió con una breve oración.

Posteriormente inició el traslado a la Catedral por la avenida Ávila Camacho, la cual se cerró al flujo vehicular. La peregrinación fue encabezada por el arzobispo y su comitiva caminó, mientras se repartía a la gente banderas de México y el Vaticano.

En punto de las 9:00 horas la iglesia lucía abarrotada y minutos más tarde llegó el gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa, acompañado por su madre la señora Cecilia de Ochoa Guasti y su esposa Karime Macías de Duarte.

Al inicio de la eucaristía, el arzobispo de Xalapa mencionó que el Gobernador cumplía años y recordó que hace 26 años su padre, Javier Duarte Franco, falleció durante los terremotos en la ciudad de México.

En emotiva celebración, el arzobispo comentó durante su homilía que Juan Pablo II fue siempre ejemplo de amor, fe y entrega, virtudes que los fieles católicos deben fortalecer.

Destacó también la importancia de la visita de las reliquias al estado sobre todo en estos momentos donde se vive un clima de inseguridad, miedo y violencia.

Durante la comunión, Reyes Larios se acercó a las primeras filas donde estaban los funcionarios estatales y municipales para repartirles la ostia y después caminó por el pasillo central, donde la repartió a los fieles que estaban cerca de él.

Al término de la eucaristía, se retiraron tanto los funcionarios como el cuerpo de seguridad del Gobernador, por lo que se inició el acceso de la gente que esperaba en Plaza Lerdo para acercarse a la urna con las reliquias del beato Juan Pablo II.

Debido a las largas filas que suben por las calles Lucio, Revolución, así como las que se ubican sobre la Plaza Lerdo y la Avenida Enríquez hasta llegar al Parque Juárez, la vialidad del primer cuadro de la ciudad está cerrada.

La gente se cubre con sombrillas, gorras, y espera pacientemente su turno. Incluso hay quienes llegaron de otros municipios caminando para tocar, al menos por unos instantes, el cristal donde está la imagen y la cápsula de cristal con la sangre del beato.

Toda la noche estarán expuestas y la gente podrá visitarlas, ya que permanecerán en Xalapa hasta las 5:00 de la mañana que serán trasladadas al puerto de Veracruz.