El miércoles 30 de mayo en el Casino Xalapeño, se realizó el Foro Estatal Educación y Cultura convocado por la Fundación Colosio, con los candidatos al Senado de la República, José Francisco Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa, así como a la Cámara Baja, Alejandro Montano Guzmán.
Por razones de fuerza mayor, no pudieron quedarse para escuchar las ponencias sobre educación superior, ciencia, financiamiento público/privado, productividad parlamentaria arte y desarrollo cultural; mas esto no fue impedimento para que cada uno de los ponentes expusiera lo que considera deberá hacer el Senador en funciones, los compromisos que tendría que asumir/cumplir; así como la rendición de cuentas que tiene que presentar de forma permanente.
Sobre el tema cultural, quien esto escribe, expone algunas de las propuestas/compromisos inscritos en la plataforma electoral, puntualizando que a diferencia de las otras organizaciones políticas, el PRI no compromete a sus legisladores que “impulsen una legislación integral que garantice el derecho a la cultura y disfrute de los bienes y servicios artísticos para todos los mexicanos” o que “reformen la Constitución a fin de establecer el compromiso del Estado en materia de cultura, incorporando disposiciones que garanticen el derecho a la cultura”.
Recupero este punto de la ponencia porque desde diferentes espacios se exige la aprobación de una Ley de Cultura, con todos sus reglamentos, para que de una vez y para siempre se dé, no sólo certeza jurídica al quehacer artístico y cultural de miles de creadores, sino que también se proponga la creación de una “cuenta satélite dentro del Sistema de Cuentas Nacionales del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática” (Piedras, 2004:28).
Sin una Ley que legitime jurídica y políticamente el trabajo creativo de millones de hombres y mujeres que hacen de las formas simbólicas el medio para expresar su percepción del mundo y las relaciones sociales, difícilmente habrá un cabal desarrollo cultural, económico y social.
Sirva de ejemplo el estudio realizado en 2004 por el doctor Ernesto Piedras Frías (CONACULTA/SOGEM/SACM) donde se demuestra que las actividades culturales protegidas por derecho de autor, también conocidas como industrias culturales, participan con el 6.7 por ciento del PIB y producen millón y medio de puestos de trabajo.
El capital creativo existente en los doscientos doce municipios del estado de Veracruz es enorme, como enormes son las oportunidades para generar ingresos a las arcas municipales, incidir en la cohesión social, el orgullo de pertenencia, el desarrollo de las sensibilidades, el fomento de la creatividad, la protección del patrimonio cultural y la mejora en la calidad de vida; pero esto no va a llegar por sí sólo, se necesita el consenso y participación de todos, la apertura de canales de diálogo, la distribución paritaria de oportunidades, el respeto a los mayores, los incentivos fiscales y financiamiento para la creación de empresas culturales.
Entre las propuestas/demandas que se enlistaron destaca la petición de que se privilegie el diseño de una Política Cultural bajo el respeto de los procesos culturales de la población, la diversidad y el pluralismo; que trascienda los cambios administrativos, de partidos o de personas.
Una Política Cultural que trascienda sus propias fronteras (arte y patrimonio) y se vincule con Universidades, Centros de Investigación Científica y Tecnológica, Sector Empresarial y de Servicios, Asociaciones Civiles, Organizaciones Religiosas, Empresas del Espectáculo y Turismo Cultural, etcétera.
También se propone la promoción de una iniciativa de ley que instituya la creación de una “Agencia de Apoyo a las Pymes Culturales; se dé impulso a un Sistema Nacional de Educación Artística y se fortalezca la educación no formal en las disciplinas artísticas.
Otro punto de la propuesta pide votar una ley que salvaguarde la propiedad intelectual, incluyendo los conocimientos, habilidades y saberes tradicionales de los pueblos indígenas, así como buscar los mecanismos para la generación de derechos culturales colectivos del patrimonio cultural tangible, intangible, natural y subacuático.
Concluye la exposición demandando una vez más que se proponga y apruebe incluir en la Educación Básica asignaturas que den a conocer y valorar el patrimonio cultural de México en cada una de sus regiones; así como el Día del Patrimonio Cultural.