Veracruz de nuevo en el primer lugar del país en secuestros: SEGOB

Por el número de secuestros denunciados en los meses de enero a septiembre de este año (114), el estado de Veracruz vuelve a ser el primero en el país en este delito de alto impacto, de acuerdo a cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) de la Secretaría de Gobernación (SEGOB).

La entidad veracruzana supera por solo un caso al Estado de México que reporta 113 secuestros en el referido periodo, según aparece en el Informe de Incidencia Delictiva del Fuero Común 2018, publicado el pasado viernes 19 de octubre.

El SESNSP precisa que la incidencia delictiva se refiere a la ocurrencia de presuntos delitos registrados en averiguaciones previas o carpetas de investigación iniciadas, reportadas por las Procuradurías Generales de Justicia y Fiscalías Generales de las 32 entidades federativas, instancias responsables de la veracidad y actualización de los datos.



Con base en el informe del SESNSP de la SEGOB, el tercer estado del país en casos de secuestros es Tamaulipas con 92, seguido de Gurrero con 42 y de Puebla con 37.

Los secuestros denunciados de enero a septiembre en Veracruz, Estado de México, Tamaulipas, Guerrero y Puebla, suman 398, que representan el 55.3 por ciento del total de denuncias por este delito en el país en el referido periodo, 719.
Por cuanto hace a la entidad veracruzana, las cifras aportadas por la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGEV) al SESNSP de la SEGOB, indican que por mes los secuestros denunciados fueron los siguientes:

Enero: 11
Febrero: 11
Marzo: 16
Abril: 15
Mayo: 11
Junio: 12
Julio: 13
Agosto: 12
Septiembre: 13



El secuestro, según la definición de la Norma Técnica para la Clasificación Nacional de Delitos para Fines Estadísticos, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), consiste en la privación ilegal de la libertad de una persona, de acuerdo con lo establecido por la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro, conducta que se puede realizar conforme a los siguientes propósitos:

I. Obtener, para sí o para un tercero, rescate o cualquier beneficio;
II. Detener en calidad de rehén a una persona
y amenazar con privarla de la vida o con causarle daño, para obligar a sus familiares o a un particular a que realice o deje de realizar un acto cualquiera;
III. Causar daño o perjuicio a la persona privada de la libertad o a terceros; o
IV. Cometer secuestro exprés.