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Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
Pobreza y envenenamiento en la sierra
Alfredo Ríos Hernández
2 de mayo de 2019
alcalorpolitico.com
*Urge ruta de esfuerzo y productividad
*Ejemplar solidaridad de veracruzanos
*¿Migrantes africanos padecen Malaria?
 
El tema sobre la intoxicación masiva de niños y adultos que suma una cifra superior a los mil cincuenta personas, que suman los listados sobre el tema levantados en varios municipios de la sierra de veracruzana de Zongolica, hechos registrados en el marco de las festividades del “Día del Niño” y que su origen se asume que fue originado por el aparente consumo de pasteles “en mal estado”, los cuales habían sido donados por una organización de servicios sociales que opera en el territorio nacional y en otros puntos del mundo, constituye un hecho que de ninguna manera debe ser en automático criminalizado, sin que ello quiera decir que los hechos no se deban de investigar con toda rapidez y eficacia, con la idea más que de castigar, de diseñar normas para que no se vuelvan a repetir.
 

Pensar desde el principio apegados al marco del muy socorrido “sospechosísimo”, concluyendo que los lamentables sucesos tienen como origen “manos criminales”, se antoja como un escenario no del todo apropiado para el caso en cuestión, dado que en primer término la institución que donó los pasteles es un organismo prestigiado sin antecedentes negativos y, en el mismo marco, todavía no existe un dictamen científico en referencia acreditando apropiadamente que los pasteles que se consumieron “se encontraban precisamente en mal estado” y que, ello, originó síntomas iniciales de intoxicaciones.
 
Es incuestionable la eficacia que para evitar tragedias sobre todo entre niños, la joya de la corona de toda colectividad, refirieron los centros asistenciales como el Instituto Mexicano del Seguro Social y los centros de salud estatales de la región, e incluso apareció la mano tendida de transportistas de la sierra de Zongolica, al tiempo que el IMSS trasladó personal inmediatamente a las regiones serranas zongoliqueñas abriendo las puertas de la clínica de Orizaba; de la misma forma aparecieron los centros médicos particulares, como el sanatorio Covadonga, abriendo puertas para brindar auxilio a los pequeños e incluso, medios de comunicación como El Mundo de Orizaba emprendió de inmediato un programa de apoyo para salvaguardar a las familias zongoliqueñas… Bien, excelente toda la colectividad de la región central en auxilio de las familias zongoliqueñas
 
Pero pasada la emergencia el tema debe ser tratado con singular delicadeza y profesionalismo, sin linchamientos apresurados y mediáticos, en los marcos de la veracidad y no de conclusiones bajo supuestos, porque al final del día, quien donó los pasteles obró de buena fe y en los ámbitos de la solidaridad en beneficio de sectores necesitados, tal como lo son los niños y familias de la sierra de Zongolica, región serrana en donde los postulados de la Revolución aún se encuentran pendientes.
 

En principio, debemos de colocar sobre la mesa, que el origen de hechos como el que nos ocupa, es la pobreza, la inequidad y las carencias, así como limitantes que para el desarrollo integral privan en las regiones serranas y rurales de nuestro territorio, marco en los cuales, los mismos hechos lamentables que hoy se investigan, refieren las carencias que esos núcleos de mexicanos afrontan y, tal innegable realidad, será invariablemente el origen primario de hechos como el que se registraron en las festividades del “día del niño”.
 
Debemos puntualizar y convencernos que mientras no encontremos los senderos reales hacia el desarrollo integral, originados por la propia capacidad productiva de la colectividad, en los marcos de la justicia, la capacitación, la disciplina y escenarios de reales oportunidades para el desarrollo integral, sin que nos equivoquemos pensando que, el eterno asistencialismo debe sustituir el esfuerzo y el empeño personal de quien aspira al bienestar y mejores niveles de vida… Porque debemos convencernos y motivarnos para entender con claridad que, mientras no pisemos en los senderos del realismo, de la justicia, de la equidad y la productividad, no del asistencialismo sistemático, permaneceremos reducidos en nuestros niveles de prosperidad, sin romper nuestras ataduras que nos inducen hacia una cultura del conformismo sin aspiraciones de superación, porque nadie ni nada nos induce hacia escenarios de un mejor porvenir, conduciéndonos para forjado por nuestro propio esfuerzo y tenacidad…
 
La culpabilidad de los lamentables escenarios en la sierra de las cuatrocientas plumas el pasado Día del Niño, la podemos ubicar en el seno mismo de nuestra sociedad, que se encuentra enmarcada por nuestras negativas actitudes y atavismos… ¿Estaremos equivocados?
 

LO QUE SE LEE
 
¿Será verdad que por irresponsabilidad de autoridades de Migración de México, un grupo de migrantes ilegales de origen africano atraviesan el estado de Veracruz rumbo a la frontera norte, pese a que se les ha detectado síntomas de Malaria?...
 
LO QUE SE OYE
 

Que si tales versiones de migrantes con Malaria, está fundamentada en la realidad, los riesgos para la población mexicana son de elevado significado, hecho que al filtrarse hacia medios de comunicación, impacta significativamente a la colectividad y que, incuestionablemente, podría reflejarse en reclamos hacia las autoridades federales para que se proceda de acuerdo a la realidad y las circunstancias que privan sobre el tema… Ya veremos.