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Columnas y artículos de opinión
Causas y efectos
Superar el estancamiento
Alfredo Ríos Hernández
19 de abril de 2021
alcalorpolitico.com
*Ocurrencias frente a EEUU
*Polémico retorno a clases
*Tropiezos gubernamentales
 
Para el colectivo social veracruzano está claro que, los elevados niveles delincuenciales registrados actualmente en tierras veracruzanas (al igual que en otros puntos del país) no registran sus orígenes en la etapa gubernamental de la actual administración gubernamental, sino que constituyen un lamentable y preocupante escenario que proviene de administraciones municipales, estatales y federales, que antecedieron tanto a la administración federal presidida por el actual Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como a quienes hoy operan en los ámbitos de seguridad bajo las instrucciones del Gobernador veracruzano, Cuitláhuac García Jiménez, tareas sobre las cuales específicamente en tierras veracruzanas “ambos dos” ya transitan cercanos a complementarse la mitad de sus respectivos sexenios, espacios inflexibles en los que se debe considerar, que muy pronto, empieza a ser “menor el tiempo” que les reste como gobernantes, que el ya transitado ejerciendo tales responsabilidades.
 

Es indudable que en el transcurso de seis años (que en espacios gubernamentales “vuelan como el viento”) las administraciones “transformadoras” de niveles gubernamentales iniciarán la reflexión que nos acercamos al escenario en el que es menor el tiempo restante por gobernar, al ya transitado en las siempre “esplendorosas cupular del poder”... Las mismas que nos dejan sentir la responsabilidad de gobernar y la satisfacción de los logros alcanzados, de las cuales también será imposible borrar escenarios que representan un espantoso listado de muertes, que no sólo habrán de ser acreditadas por la historia como efectos de los elevados riesgos del coronavirus, sino que paralelamente a ello en el hojear de nuestro pasado, habrán de aparecer las notorias deficiencias que, tanto hacia el control de la expansión pandémica como hacia las notorias deficiencias en materia de atención médica hospitalaria (lo que también se ha registrado en el tema de niños agredidos por el cáncer) conformarán “pecados imborrables” en el registros de sectores hospitalarios, así como en la memoria de los mexicanos, quienes perdieron a quienes amaban o vieron sufrir por carencias médicas originadas en los espacios del descuido gubernamental.
 
Y a los niveles de violencia, inseguridad, miedo hacia nuestro propio entorno, habrán de sumarse los efectos de impactantes efectos negativos de una economía debilitada, no sólo comparada a las peores etapas del desplome financiero registradas en el historia del país, con millones de empleos desplazados ante el retroceso productivo, en parte como efectos colaterales de la pandemia y, en otro tanto, propiciados por programas y acciones gubernamentales de la llamada “Cuarta Transformación” en la que proyectos de multimillonario costo se fueron en picada, como lo acontecido con el nuevo aeropuerto internacional de la ciudad de México, que habría de ser uno de los mejores del mundo y cuya inversión, se dejó en el abandono para ser sustituido por “un remedo” de instalaciones que han causado negativas referencias de asombro, no sólo en espacios de sectores nacionales, sino en ámbitos internacionales, apuntes que desdoran el prestigio de los mexicanos en escenarios internacionales y que, obviamente, repercuten negativamente en la economía nacional, desde la turística hacia la industrial en lo general.
 
Se sostiene por parte de especialistas en la materia, que toda nueva estructura de gobierno refiere sus puntos de real impulso hacia el desarrollo integral, de manera regular en su tercer año de administración, bajo tales criterios, en el contexto social mexicano muy pocos estarían en la posibilidad de calificar al Gobierno de la Cuarta Transformación, en un real ejemplo a seguir, para ensanchar el desarrollo integral de las naciones, máxime cuando en los escenarios de La Transformación Mexicana, nos situamos entre los países de mayor tragedia luctuosa como resultado de la pandemia, al tiempo que también son mayores los efectos negativos en el renglón económico y, conjuntamente con ello, no se ha logrado retornar a niveles de seguridad que nos permitan destacar como un país de tranquilidad y bienestar.
 

De siempre en el territorio mexicano ha existido la expresión “que más vale tarde que nunca”... Tal referencia podría constituir una posibilidad de que en México las autoridades federales efectuaran un golpe de timón y, dejando atrás programas e ideas improductivas, así como inequitativas y obviamente centralistas, se procediera hacia una apertura para conciliar intereses entre instituciones gubernamentales y renglones productivos del sector privado, que permitieran rescatar espacios de productividad, favoreciendo un mayor desarrollo integral, en el que en lugar de restar se sumara y, en el cual se restablecieran con mayor vigor y seriedad, sólidos ámbitos productivos cuyo origen debe ser el sector privado, siempre apegado a las legalidad y hacia programas socioeconómicos, propuestos con seriedad en ámbitos gubernamentales, tal y como se registra en países vecinos de Estados Unidos y Canadá, al igual que en muchos otros de Europa, Asia y el mundo entero.
 
Porque México debería apostar a lo mejor del ámbito financiero tanto en América como en los diversos continentes del mundo, no sujetarnos a criterios y políticas que en lugar de fomentar el desarrollo integral nos conducen hacia el estancamiento e incluso el atraso, prueba de ello es que hoy, ya en el tercer año de la Transformación todos advertimos que estamos económicamente paralizados o en marcha regresiva... Ahí la dejamos.
 
Lo que se lee
 

El proponer en México, la posibilidad, de que todo “migrante trabajador” que demuestre en su tierra ser hombre de bien y que ingrese al territorio norteamericano y demuestre con su conducta que es un hombre honesto y esforzado, adquiera con ello el derecho no sólo de residir en tierras estadunidenses, sino incluso “el derecho” a solicitar la nacionalidad estadunidense, refiere una propuesta que por sí misma, deja entrever una clara tendencia intervencionista por parte del Gobierno Mexicano, en temas y asuntos que sólo le competen al pueblo y Gobierno de los Estados Unidos, escenario que incuestionable podría, incluso, desgastar aún más las relaciones y los buenos oficios comerciales y de relaciones mutuas que, con todo y diferencias en el camino se mantienen vigentes entre los dos países.
 
Debe tenerse en claro que incluso entre el colectivo social mexicano, las buenas relaciones entre vecinos de un área habitacional, reclaman como imprescindibles la “no intervención” entre un vecino y otro, del manejo que toda familia aplica al interior del hogar, porque simple y sencillamente “el respeto al derecho ajeno tanto entre naciones como entre individuos, es la paz”...
 
En los mismos contextos se podría referir que México no representa precisamente un ejemplo frente al mundo en el trato a migrantes, e incluso hacia viajeros mexicanos que con alarmante frecuencia al interior de nuestro país, son víctimas de la inseguridad y de conductas inapropiadas, tanto por parte de grupos criminales como de autoridades... Por lo mismo los apuntes en referencia, por sí mismo podrían originar que en tierras norteamericanas pudieran “fruncir el ceño” ante un planteamiento “dominguero”... Como el expuesto recientemente por el Presidente de los mexicanos.
 

Lo que se ve
 
Claro que la mayoría de los maestros (si no es que todos) aprovecharán el llamado del Gobierno del Estado veracruzano para vacunarse contra el Covid-19, pero no precisamente porque todos se encuentren en total acuerdo para el reinicio de clases presenciales, sino porque nadie dejaría pasar la oportunidad de vacunarse, antes que muchos millones de mexicanos, protegiéndose contra la agresión pandémica que incluso puede ser de consecuencias mortales...
 
Porque el reinicio a clases presenciales (debe quedar claro) refiere la elevada posibilidad no sólo que los maestros resulten contagiados, sino también los alumnos y con ellos sus hermanos, sus padres, sus familiares y los amigos en lo general, panorama que no debe ser descartado y que, de presentarse, podría convertirse en un severo problema entre el sector magisterial, las familias de los alumnos y obviamente las autoridades estatales y federales.
 

El escenario negativo sobre el tema en referencia nadie lo desea, pero indudablemente podría convertirse en efecto originado por el reinicio de clases presenciales y, de ello la primera responsabilidad... ¿En quiénes recaería?
 
Lo que se oye
 
Y Usted coincidiría con la opinión de las autoridades federales, en el sentido de que todo el personal del magisterio se encuentre capacitado para otorgar “apoyo socioemocional” tanto hacia los alumnos como entre los mismos maestros, ante escenarios repentinos de probable contagio de la pandemia entre alumnos y maestros, lo que las propias autoridades federales ya contemplan como un factible panorama al interior de las escuelas, en cuanto se reanuden las clases presenciales.
 

Las referencias en dicho contexto, obligan hacia la reflexión que en los ámbitos oficiales del sector educativo, ya se valora la clara posibilidad de contagios al interior de las escuelas, presunción que por sí misma debería de evitar el apresuramiento que ha surgido para retornar a las clases presenciales, hecho que por las referencias de factibles emergencias en torno al tema, obviamente que siembran preocupación en conglomerado social en lo general.
 
Lo que se ve
 
Resulta incomprensible y hasta referencias de irreflexivas, el que a los sectores en reclamo de ser vacunados ante la severa amenaza pandémica, desde la misma Presidencia de la República no sólo se les criminalice, sino que se diseñen campañas en el marco gubernamental para desacreditar tales reclamos, los cuales ya resultan crecientes al interior del colectivo social.
 

La responsabilidad de que no existan las suficientes vacunas en México para atender con mayor prontitud a todos los sectores de la población, no debe ser acreditada al ciudadano portador del reclamo, quien como mexicano tiene todo el derecho a ser vacunado, en tanto que las deficiencias para disponer de vacunas suficientes son un reflejo de las inapropiadas negociones (en tiempo y forma) practicadas por las autoridades, para la adquisición del número de vacunas apropiadas.
 
Las fallas sobre el tema (porque incuestionablemente existen) son las mismas que se han advertido en otros renglones de salud pública, como lo es el dramático caso de los niños con cáncer, tema que desde los inicios de la actual administración federal, refirió la inconsistencia de los conocimientos y efectividad en el renglón de asistencia médica, en los marcos de un nuevo estilo de Gobierno que se practica en el territorio nacional.