12 de julio de 2021
alcalorpolitico.com
*Incongruencia bancaria
*Bienestar en picada
*Morales Lechuga dice “no”
¿Y en realidad en un conglomerado social como el de México o de cualquier otra parte del mundo, para que se procese judicialmente a un ex funcionario público se requiere de una consulta popular, o simplemente se necesita de pruebas suficientes y fehacientes para proceder a dicha acción?... Son apuntes que obligadamente deberíamos los mexicanos evaluar y, de manera especial, analizar meticulosamente, máxime cuando nos encontramos en una de las etapas sociopolíticas mayormente discutibles sobre el pasado de nuestro país, todo ello a la sombra de un protagonismo presidencial, de niveles no registrados en la historia de las actuales generaciones de mexicanos, en el que se practica el circo, la maroma y mire Usted que si se practica el teatro.
Ciertamente el territorio nacional mexicano se ha convertido en un escenario gigantesco de quien, como portador de la Presidencia de República, lo utiliza para mensajes escenógrafos sin igual en la historia del país, y por ello convirtiéndose en el foco central de la vida cotidiana, más que por los avances obtenidos en materia gubernamental en el renglón de obras, servicios y bienestar en lo general, por la serie de cotidianas descalificaciones dirigidas, más que hacia la búsqueda de consolidar claros y exitosos niveles de vida de todos los sectores de la población, invariablemente hacia el fortalecimiento de un sector de simpatizantes, que son inducidos con el discurso diario hacia el diseño de un nuevo país, al que se le acredita “paz, progreso, bienestar y justicia”...
Pero se da el caso en ese mismo teatro de estilo gubernamental, que el objetivo fundamental de los artífices transformadores (porque así lo demuestran los hechos) es que el transcender en lo personal y obviamente en popularidad, es el mayor interés, el objetivo primario que se persigue en los marcos del actual sistema gubernamental, marco en el cual se practican tácticas claramente estimulantes para entrelazar a la fuerza gobernante con el poderío ciudadano, lo que ya ha sucedido en países de América que hoy lamentan los cubanos, los venezolanos, nicaragüenses, los peruanos y otros más.
Lo que hoy se vive en México no es nuevo, por ello existen opiniones en contra que deberían ser atendidas tanto al interior del Congreso, como de los tribunales, pero de la misma forma por el elector, porque a México lo que le conviene y urge es acrecentar más y mejores fuentes de trabajo, no más intromisión socializante en la economía y conductas del país, experiencias que definitivamente no son gratas en los contextos de la historia mundial y los ejemplos están presentes en la historia actual.
Yo creo que muchos de nosotros (los hoy ya vetustos) referimos tendencias socialistas en el tiempos de nuestra juventud, pero al final entendimos que siempre será mejor alcanzar la autosuficiencia ciudadana por vía de oportunidades laborales, esparcidas en el país por la alianza productividad y buen gobierno, que el pretender desarrollarnos y alcanzar mayor bienestar, sólo por vía de la fuerza económica del presupuesto gubernamental, en espacios donde el bienestar se confunde con improductividad, lo que es derivado de sistemas demagógicos y tradicionalmente populistas.
Lo que se lee
Y por qué complicarles a los adultos mayores el cobro de su pensión como resultado de su tarjeta bancaria “VENCIDA”, cuando las instituciones gubernamentales pudieron (de común acuerdo con las empresas Bancarias) actuar con toda antelación, para generar una nueva tarjeta y hacerla llegar con toda oportunidad en tiempo y forma, a los mayores ya pensionados por antigüedad, o quienes se encuentran en rangos de discapacidad...
¿Acaso en las instituciones bancarias y en los espacios gubernamentales, en realidad no disponen de la tecnología cibernética para proceder en tiempo y forma apropiados en dicho tema?... ¿Por qué en lugar de agilizar todo trámite en favor de Adultos Mayores (así, con mayúsculas) pareciera que los procesos tanto gubernamentales como bancarios se obstruccionan?
Atender con prontitud incluso adelantando acciones para favores en los trámites bancarios a los adultos mayores, así como pensionados por incapacidad, debería de constituir una de las líneas prioritarias en organismos bancarios, sin embargo la preocupación y protestas de los pensionados y personas discapacitadas, ante el vencimiento de sus respectivas tarjetas relacionados con su pensión que, a más de ello, no son de crédito sino de débito, debería de constituir una de las vías realmente “desburocratizadas” de las áreas bancarias, favoreciendo con ello a quienes por su edad y achaques propios del paso de los años, así como el riesgo que para su salud representa, de repente se encuentran con que su tarjeta bancaria ya caducó, abriéndose ante “ella o él” una serie de trámites que le resultan agobiantes, mismo que por sus propias características de adulto mayor, lo colocan en rangos de irritabilidad, paralelamente a que ronda en oficinas púbicas la amenaza del coronavirus... Seamos cordiales, oportunos y de rápidas soluciones, ante quienes han trabajado toda su vida y por lo mismo merecen toda nuestra atención.
Lo que se ve
Difícilmente el colectivo social podría habituarse a las balaceras con el derramamiento de sangre de víctimas por doquiera, hechos que no han decrecido significativamente en México (y en regiones como Veracruz menos) tierras en las que se continúa afrontando un panorama de terror, escenarios a los que nadie se podría habituar, porque de siempre el mayor bien que un colectivo social puede atesorar, es el de vivir en los marcos de la tranquilidad, al que se agrega el bienestar familiar.
Nada daña más al conglomerado social que la delincuencia y los actos de barbarie cometidos por criminales, porque de siempre se ha valorado que la paz es el mayor bien para una sociedad, agregado o emparejado a ello la oportunidad del desarrollo económico en lo familiar y obviamente en lo personal.
Pero está claro que, sin los apropiados niveles de seguridad, nunca se podrán alcanzar espacios de mayor bienestar para la sociedad y, ello, incuestionablemente deteriora nuestro nivel de vida y capacidad de desarrollo social integral... O sea, que “perdemos todos” y eso es precisamente lo que está aconteciendo en tierras mexicanas... Vamos en picada en el desgastado concepto de bienestar social.
Lo que se oye
Se comenta en ámbitos sociopolíticos, la referencia escrita vía Tweets por el connotado Notario Público Ignacio Morales Lechuga, quien ha sido destacado en la vida pública veracruzana y nacional, mensaje en redes en el cual anota:
“No votaré en la consulta el 1 de agosto,
no me prestaré a la farsa.
La Justicia se imparte no se consulta”
*Bienestar en picada
*Morales Lechuga dice “no”
¿Y en realidad en un conglomerado social como el de México o de cualquier otra parte del mundo, para que se procese judicialmente a un ex funcionario público se requiere de una consulta popular, o simplemente se necesita de pruebas suficientes y fehacientes para proceder a dicha acción?... Son apuntes que obligadamente deberíamos los mexicanos evaluar y, de manera especial, analizar meticulosamente, máxime cuando nos encontramos en una de las etapas sociopolíticas mayormente discutibles sobre el pasado de nuestro país, todo ello a la sombra de un protagonismo presidencial, de niveles no registrados en la historia de las actuales generaciones de mexicanos, en el que se practica el circo, la maroma y mire Usted que si se practica el teatro.
Ciertamente el territorio nacional mexicano se ha convertido en un escenario gigantesco de quien, como portador de la Presidencia de República, lo utiliza para mensajes escenógrafos sin igual en la historia del país, y por ello convirtiéndose en el foco central de la vida cotidiana, más que por los avances obtenidos en materia gubernamental en el renglón de obras, servicios y bienestar en lo general, por la serie de cotidianas descalificaciones dirigidas, más que hacia la búsqueda de consolidar claros y exitosos niveles de vida de todos los sectores de la población, invariablemente hacia el fortalecimiento de un sector de simpatizantes, que son inducidos con el discurso diario hacia el diseño de un nuevo país, al que se le acredita “paz, progreso, bienestar y justicia”...
Pero se da el caso en ese mismo teatro de estilo gubernamental, que el objetivo fundamental de los artífices transformadores (porque así lo demuestran los hechos) es que el transcender en lo personal y obviamente en popularidad, es el mayor interés, el objetivo primario que se persigue en los marcos del actual sistema gubernamental, marco en el cual se practican tácticas claramente estimulantes para entrelazar a la fuerza gobernante con el poderío ciudadano, lo que ya ha sucedido en países de América que hoy lamentan los cubanos, los venezolanos, nicaragüenses, los peruanos y otros más.
Lo que hoy se vive en México no es nuevo, por ello existen opiniones en contra que deberían ser atendidas tanto al interior del Congreso, como de los tribunales, pero de la misma forma por el elector, porque a México lo que le conviene y urge es acrecentar más y mejores fuentes de trabajo, no más intromisión socializante en la economía y conductas del país, experiencias que definitivamente no son gratas en los contextos de la historia mundial y los ejemplos están presentes en la historia actual.
Yo creo que muchos de nosotros (los hoy ya vetustos) referimos tendencias socialistas en el tiempos de nuestra juventud, pero al final entendimos que siempre será mejor alcanzar la autosuficiencia ciudadana por vía de oportunidades laborales, esparcidas en el país por la alianza productividad y buen gobierno, que el pretender desarrollarnos y alcanzar mayor bienestar, sólo por vía de la fuerza económica del presupuesto gubernamental, en espacios donde el bienestar se confunde con improductividad, lo que es derivado de sistemas demagógicos y tradicionalmente populistas.
Lo que se lee
Y por qué complicarles a los adultos mayores el cobro de su pensión como resultado de su tarjeta bancaria “VENCIDA”, cuando las instituciones gubernamentales pudieron (de común acuerdo con las empresas Bancarias) actuar con toda antelación, para generar una nueva tarjeta y hacerla llegar con toda oportunidad en tiempo y forma, a los mayores ya pensionados por antigüedad, o quienes se encuentran en rangos de discapacidad...
¿Acaso en las instituciones bancarias y en los espacios gubernamentales, en realidad no disponen de la tecnología cibernética para proceder en tiempo y forma apropiados en dicho tema?... ¿Por qué en lugar de agilizar todo trámite en favor de Adultos Mayores (así, con mayúsculas) pareciera que los procesos tanto gubernamentales como bancarios se obstruccionan?
Atender con prontitud incluso adelantando acciones para favores en los trámites bancarios a los adultos mayores, así como pensionados por incapacidad, debería de constituir una de las líneas prioritarias en organismos bancarios, sin embargo la preocupación y protestas de los pensionados y personas discapacitadas, ante el vencimiento de sus respectivas tarjetas relacionados con su pensión que, a más de ello, no son de crédito sino de débito, debería de constituir una de las vías realmente “desburocratizadas” de las áreas bancarias, favoreciendo con ello a quienes por su edad y achaques propios del paso de los años, así como el riesgo que para su salud representa, de repente se encuentran con que su tarjeta bancaria ya caducó, abriéndose ante “ella o él” una serie de trámites que le resultan agobiantes, mismo que por sus propias características de adulto mayor, lo colocan en rangos de irritabilidad, paralelamente a que ronda en oficinas púbicas la amenaza del coronavirus... Seamos cordiales, oportunos y de rápidas soluciones, ante quienes han trabajado toda su vida y por lo mismo merecen toda nuestra atención.
Lo que se ve
Difícilmente el colectivo social podría habituarse a las balaceras con el derramamiento de sangre de víctimas por doquiera, hechos que no han decrecido significativamente en México (y en regiones como Veracruz menos) tierras en las que se continúa afrontando un panorama de terror, escenarios a los que nadie se podría habituar, porque de siempre el mayor bien que un colectivo social puede atesorar, es el de vivir en los marcos de la tranquilidad, al que se agrega el bienestar familiar.
Nada daña más al conglomerado social que la delincuencia y los actos de barbarie cometidos por criminales, porque de siempre se ha valorado que la paz es el mayor bien para una sociedad, agregado o emparejado a ello la oportunidad del desarrollo económico en lo familiar y obviamente en lo personal.
Pero está claro que, sin los apropiados niveles de seguridad, nunca se podrán alcanzar espacios de mayor bienestar para la sociedad y, ello, incuestionablemente deteriora nuestro nivel de vida y capacidad de desarrollo social integral... O sea, que “perdemos todos” y eso es precisamente lo que está aconteciendo en tierras mexicanas... Vamos en picada en el desgastado concepto de bienestar social.
Lo que se oye
Se comenta en ámbitos sociopolíticos, la referencia escrita vía Tweets por el connotado Notario Público Ignacio Morales Lechuga, quien ha sido destacado en la vida pública veracruzana y nacional, mensaje en redes en el cual anota:
“No votaré en la consulta el 1 de agosto,
no me prestaré a la farsa.
La Justicia se imparte no se consulta”