1.- Hemos dicho que para los días cuatro y cinco de agosto, el PRI tendría afinados los detalles en sus propuestas para llevarlos a la Asamblea Nacional, bajo la temática de: Visión de futuro, Rendición de Cuentas y Ética, Declaración de Principios, Programa de Acción y Estatutos, y hasta hoy casi diez después de que concluyó el proceso electoral, y aún bajo el efecto del dos de tres <<para las gubernaturas>> y casi un cuarto de las alcaldías en juego en el estado, el Revolucionario Institucional se reporta vivo y dispuesto a lo que sigue.
 
Y lo que sigue para el 2018 es la renovación de los poderes Legislativo y ejecutivo Federal, y, adicionalmente, los diputados al Congreso Local y el Poder Ejecutivo, lo que significa jugar a la ruleta rusa sin balas de salva.
 
Hoy, a estas horas del juego lo que importa en esa temática pendiente del PRI, aparte de la visión del futuro a esa formación partidista, importa y mucho cual vaya a ser el tratamiento para el proceso de selección del candidato a la presidencia de la república, que es, secreto a voces, depende de una sola voluntad aunque ésta se llenada de información de todas partes.
 

Es una sola voluntad la que decide el quién y el cómo, a pesar de que haya voces que buscan el consenso que, en la mayoría de los casos, no suele darse porque todos quieren lo mismo. Sin embargo, hoy el Presidente de la República ha recuperado espacios y no se espera que los pierda, sobre todo si se enracha en acciones que beneficien al pueblo y sus bolsillos.
 
2.- Se ha probado hasta el cansancio que cuando hay muchos aspirantes a un solo cargo, la omisión y la traición suelen brotar como hongos, y si hay alguna duda, elija el municipio que le guste y encontrará omisos y traidores, alentados por el hecho de no haber sido los elegidos.
 
La omisión y la traición son comunes en la política, y los conversos también abundan. La excepción la constituyen los que se van de un partido cuando no hay proceso electoral en puerta. Cuando la mente y el corazón están fríos y calientes, respectivamente.
 

3.- Ahora hay tiempo para las decisiones. El candidato debe ser un militante o un externo, ¿sin credencial del partido? Y deben decidirlo cuanto antes: O afilian a un posible candidato al partido, o se la juegan con un NO MILITANTE. Esta decisión llevará al triunfo o a la derrota al partido, visto como está deteriorada la base de militancia dura del tricolor.
 
Pero es necesario que haya una decisión al concluir la Asamblea Nacional, sobre todo, si se modifican los Estatutos.
 
Narro, Meade Kuribreña, o Nuño por los libres; Videgaray, Beltrones u Osorio Chong por los que tienen credencial del PRI y cargos de elección popular.
 

Y serán candidato, Ejecutivo quien sabe.
 
4.- Ya si se va o se queda Enrique Ochoa Reza es intrascendente aunque, como premio a lo poco que pudo hacer, bastaría con una senaduría, y si es de representación proporcional, pues mejor.
 
Y en este listado, también estaría Claudia Ruiz Massieu Salinas, salvo que ella sea elegida como Presidenta del partido en el poder, que dicho sea, deberá prepararse para la embestida de las alianzas de “izquierda” (Morena y PT) y la multifuncional del PRD/PAN con candidato azul, y de pilón, una de Independientes.
 

Y esto apenas empieza, porque estarían pendientes los espectáculos de Morena y PAN, reclamando, quien los viera, la anulación de las elecciones en el Estado de México y Coahuila. No les dio el voto por voto y casilla por casilla y van a lo que sigue.
 
P.D.- Las alianzas para el 2018 tendrán, por necesidad, uno y uno; uno y una en las candidaturas. Los equilibristas tendrán que entrenar duro para su postulación, sobre todo al Senado de la República; y no todos serán pluris…