27 de julio de 2017
alcalorpolitico.com
1.- Ayer hacía esfuerzos Enrique Ochoa Reza para convencer a los priistas rejegos de que en la XXII Asamblea, se utilicen los servicios del extinto Harry Houdini para desaparecer los “candados” que impiden, por ejemplo, que Aurelio Nuño o Meade Kuribreña sean designados, no elegidos, <<uno u otro>> candidatos del PRI a la presidencia de la república.
Ya cuando se mencionaba al hoy todavía Secretario de Educación para presidir el CEN del PRI, propalamos la circunstancia de que se estaría construyendo el acta de defunción de esa fuerza hoy maniatada, que todavía lo es, pese a las encuestas a modo que nadie dice quién paga pero que se publican en favor de alguien. Pero ahora, el sólo hecho de mencionarlo como posible candidato, suena a blasfemia.
Porque, pese a la sentencia de que basta un año <<o menos>> para ser candidato y fortalecer la candidatura, suena como a un “mito genial” que la militancia de esa formación política ahora parece que no aguantarán más.
2.- Y decíamos ayer: ¿Por qué desde el poder es tan difícil tomar una decisión acertada? Y esto se fundamentaría precisamente porque desde allí <<desde el poder>> se tiene la mejor información del sentir no sólo de la militancia partidista, sino de la sociedad en general.
Viene esto a colación porque hace algunos años, el jefe real del priismo, sacrificó cercanías; parentesco o amistad para incidir en una persona que tuviera las mejores posibilidades de ganar una elección, como sucedió.
Ese pragmatismo político parece hoy ausente.
Y aunque si bien es cierto que ni MAO <<Miguel Angel Osorio>> ni MFB <<Manlio Fabio Beltrones>> podrían garantizar un triunfo para su partido <<que nadie podría hacerlo hoy mismo>>, sí garantizarían, cuando menos, ser candidatos con posibilidades de ganar una elección.
3.- Y entonces porque Ochoa Reza <<en vísperas de dejar el CEN>> no es claro con quienes lo mantienen en las oficinas de Insurgentes Norte y les dice con quién sí o quién no debe jugarse la suerte del tricolor.
Pero de esto a andar “litigando” que los rejegos rindan la plaza y acepten a quien desde el poder se les envíe a los priistas como “su candidato”, hay mucha distancia.
Pueden “mandar al que quieran” como candidato, pero no mandarnos a apoyarlo, como diría un clásico al comentar el tema.
4.- La terracería se le sigue pavimentando al eterno que ahora firma “que la tercera es la vencida”, aunque podría aparecérsele por allí un aspirante que iría por la cuarta ocasión y echar a perder su “primer lugar” en las encuestas de quien se empeña en llevarlo a Los Pinos aparezca allí.
P.D.- ¿A quién le importa quién haya ganado la copa de oro?
[email protected]
Ya cuando se mencionaba al hoy todavía Secretario de Educación para presidir el CEN del PRI, propalamos la circunstancia de que se estaría construyendo el acta de defunción de esa fuerza hoy maniatada, que todavía lo es, pese a las encuestas a modo que nadie dice quién paga pero que se publican en favor de alguien. Pero ahora, el sólo hecho de mencionarlo como posible candidato, suena a blasfemia.
Porque, pese a la sentencia de que basta un año <<o menos>> para ser candidato y fortalecer la candidatura, suena como a un “mito genial” que la militancia de esa formación política ahora parece que no aguantarán más.
2.- Y decíamos ayer: ¿Por qué desde el poder es tan difícil tomar una decisión acertada? Y esto se fundamentaría precisamente porque desde allí <<desde el poder>> se tiene la mejor información del sentir no sólo de la militancia partidista, sino de la sociedad en general.
Viene esto a colación porque hace algunos años, el jefe real del priismo, sacrificó cercanías; parentesco o amistad para incidir en una persona que tuviera las mejores posibilidades de ganar una elección, como sucedió.
Ese pragmatismo político parece hoy ausente.
Y aunque si bien es cierto que ni MAO <<Miguel Angel Osorio>> ni MFB <<Manlio Fabio Beltrones>> podrían garantizar un triunfo para su partido <<que nadie podría hacerlo hoy mismo>>, sí garantizarían, cuando menos, ser candidatos con posibilidades de ganar una elección.
3.- Y entonces porque Ochoa Reza <<en vísperas de dejar el CEN>> no es claro con quienes lo mantienen en las oficinas de Insurgentes Norte y les dice con quién sí o quién no debe jugarse la suerte del tricolor.
Pero de esto a andar “litigando” que los rejegos rindan la plaza y acepten a quien desde el poder se les envíe a los priistas como “su candidato”, hay mucha distancia.
Pueden “mandar al que quieran” como candidato, pero no mandarnos a apoyarlo, como diría un clásico al comentar el tema.
4.- La terracería se le sigue pavimentando al eterno que ahora firma “que la tercera es la vencida”, aunque podría aparecérsele por allí un aspirante que iría por la cuarta ocasión y echar a perder su “primer lugar” en las encuestas de quien se empeña en llevarlo a Los Pinos aparezca allí.
P.D.- ¿A quién le importa quién haya ganado la copa de oro?
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