1.- Siguen los dimes y diretes entre las Cámaras, la de diputados y la de senadores; el disenso: Lo que ganarán los de la Cámara Alta y los de la Cámara Baja, éstos últimos fueron los que fijaron sus ingresos en nombre de la austeridad “republicana”, para ahorrar al Ejecutivo algunos pesos.
 
Y como para no comprometerse más, los de San Lázaro dejaron a sus colegisladores el peso de la decisión: A los senadores les bajaron los diputados de 105 mil pesos por mesada, a la “reducida cantidad de 75 mil pesos.
 
En la Cámara de Senadores criticaron el recorte y el hecho de que los diputados no se hayan bajado sus percepciones. Es decir, los de San Lázaro dejaron en manos de los integrantes del Senado, quedarse con el sueldo nominal de 105 pesos para que ellos “carguen con el muerto” de no respetar la austeridad. Más claro: “Hágase la voluntad del de arriba, en los bueyes de mi compadre”.
 

Debe señalarse que durante la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020, los diputados establecieron por una parte, que el salario de los senadores sería el mismo que tenían en 2019, sin embargo, por otra parte, que se reduciría de 105 mil a 75 mil pesos mensuales.
 
Ante tal situación, los integrantes de la Cámara de Senadores criticaron el recorte [a su dieta] y que los diputados no se hayan bajado sus percepciones.
 
A eso se deben los diferendos en el Congreso de la Unión... por pesos nada más.
 

2.- Y aquí el revire: En el Senado de la República no aceptaron los cambios formulados por los diputados al artículo 108 Constitucional, bajo la consideración de que se pretende mantener privilegios a los legisladores, por lo que se regresó la minuta respectiva a San Lázaro.
 
Si la Cámara de Diputados no se allana y mantienen la modificación al artículo 108, esa reforma propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, la iniciativa quedará congelada durante un año.
 
Dicen los medios: “…En un ambiente de confrontación con los diputados –por la decisión unilateral de reducirles las dietas- el senador de Morena, Eduardo Ramírez, llamó a los legisladores de su partido ‘a no traicionar los principios del movimiento’ y recordó que, como cámara de origen, el Senado aprobó esa reforma a los artículos 111 y 108 Constitucionales, por lo que se incrementa el catálogo de delitos por los que puede ser juzgado el presidente de la República.
 

En la actualidad, el Ejecutivo sólo puede ser procesado por traición a la patria y delitos graves del fuero común, pero la reforma lo amplió a delitos electorales y por corrupción.
 
El Senado, como cámara de origen, modificó la iniciativa presidencial e impuso ese mismo catálogo de delitos para los legisladores federales, pero al turnar la minuta a la Cámara de Diputados, éstos rechazaron tal cambio y la regresaron.
 
Por 97 votos en contra, 4 a favor y 4 abstenciones, el Senado no aceptó el cambio y por segunda ocasión mandaron a San Lázaro la minuta, pese a que el senador de Morena, Martí Batres, advirtió que los diputados tienen razón, ya que se reducen los delitos por los que pueden ser sometidos a proceso penal los legisladores, que sólo serían los que se aplican al presidente de la República”...
 

3.- Recientemente el CEN del PRI cambió el CDE en el estado de México. Allí se rememoraron los mejores tiempos del tricolor en el poder.
 
Alejandro Cárdenas Moreno, [Alito para sus amigos] tomó la protesta ante un nutrido auditorio [dado que el PRI gobierna esa entidad] a Alejandra Del Moral y su compañero de fórmula, Darío Zacarías Capuchino. Por cierto y hasta hace algunas semanas, ambos formaban parte del gabinete estatal; como titulares de las secretarías de Desarrollo Económico y Desarrollo Agropecuario, respectivamente.
 
El PRI, pues, no está muerto. Patalea en silencio porque el ADN que corre por su cuerpo así ha recibido instrucciones.
 

Que les aproveche.