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Columnas y artículos de opinión
Trinchera Final
¿Próxima generación o próxima elección?
Jenaro del Ángel Amador
7 de julio de 2021
alcalorpolitico.com
1.- Suelen citarse con frecuencia las frases que la historia atribuye a Otto von Bismark y a Winston Churchill: “Un político se transforma en estadista cuando piensa más en la próxima generación que en la próxima elección”.
 
Pero el paso de un político a estadista no es por escalafón ni por el número de votos que puedan llevarlo a cargos “políticos”.
 
Son los hechos; las palabras; los dichos; su realidad lo que convierte a un hombre en político, y de allí: sus acciones, sus logros de bienestar para con la sociedad y su realidad de gobernante, lo que lo lleva a estadista.
 

¿Y qué con la próxima generación? ¿De adultos a secas o adultos mayores? Por citar un ejemplo: soy parte de una generación de estudiantes: 1965-1969 y los que cupimos en ella integramos esa generación.
 
En una próxima elección caben todos los que puedan conseguir un cargo o una candidatura, de la edad que tengan: de 18-30-40-y en adelante. Esa la “próxima generación” que irá a una elección o designación en su caso.
 
2.- Pero las frases de los cancilleres Otto von Bismark y Winston Churchill tienen una aplicación de más alto rango. Ambos gobernantes en ejercicio en Alemania y Reino Unido, tiene mayor relevancia.
 

Vivieron una época convulsa en un mundo convulso. Y ambos actuaron pensando en el bienestar de sus pueblos.
 
El continental fue artífice de la unificación alemana y una de las figuras clave de las relaciones internacionales durante la segunda mitad del siglo XIX.
 
El de Reino Unido fue un estadista británico que se desempeñó como Primer Ministro del Reino Unido de 1940 a 1945. Y ambos vivieron la Segunda Guerra Mundial.
 

Se necesita “fuerza de carácter, generosidad, grandeza y visión, características que debe tener todo aquél que pretenda llamarse líder, sea político, social o comunal”.
 
Ellos actuaron pensando en la próxima generación de sus respectivos países. Nada de miserias políticas.
 
3.- Durante muchos años en nuestro país se atribuyó al PRI [y claro que fue cierto] una etapa “de destapes políticos”. El gobernante en turno aleccionaba a sus alfiles para que “destaparan” a Equis Y Griega, o al AbeCe para tal o cual cargo público o de elección popular. Y el destapado ocupaba cargo, coincidentemente, o la candidatura.
 

Más adelante idearon “las ternas” y zangoloteban tres o cuatro nombres de personajes que más tarde, casualmente, uno de ellos era el elegido de la membresía de su partido o del gobernante en turno.
 
Y esta práctica duró muchos años.
 
Y otros partidos, que practicaban “la democracia interna”, se aburrieron de pleitos y rencores y optaron por el método de aquél partido de tres colores.
 

Pero, sin embargo, no anticipaban vísperas. Eran rígidos con los calendarios de elecciones o años-duración en su cargo del gobernante, dueño de la decisión.
 
No propiciaban con esto, “rebeliones en la granja” y todos con la fiesta en paz.
 
Los tiempos eran los rectores de estas prácticas, desechadas quizá hoy, pero muy eficaces en el pasado de no hace muchos años.
 

Que respeto le tenían a los tiempos. Tiempos sagrados para los políticos, quizá no estadistas.
 
4.- Hace algunos días, con motivo del hambre de cargos de algunos “políticos” que postulados por Movimiento Ciudadano, sembraron el caos en un pueblo pacífico y trabajador como Cazones de Herrera [que conocí bien a bien] adelanté una víspera. Ultimaron al candidato registrado. Un día antes de las elecciones registraron otro candidato [imputado a la postre como presunto homicida], pero nadie de MC se fijó en que el candidato suplente siguió siendo el mismo registrado en unión del candidato sacrificado.
 
Si esto es cierto y la ley es clara, la solución es simple: Debe ser el presidente municipal, lejos de entuertos políticos. Y nada más.
 

Colofón: El señor llamado Marlon Ramírez Marín, dicen rumores callejeros, que fue visto entrando al edificio del PRI con lentes y un sombrero puesto en la cabeza... ¿Será?