Lleva casi un mes internado en el ISSSTE Xalapa en espera de una cirugía, denuncia

A QUIEN CORRESPONDA
P R E S E N T E

El que suscribe Martín Cervantes Contreras, edad 55 años, con domicilio en la calle Tlanease, lote 22, manzana 10, colonia Unión Antorchista, con filiación al ISSSTE CEHA820802/5, me dirijo por este medio para informar sobre mi situación de salud, exponer la negligencia con que se me ha atendido y se atienda mi caso que a continuación describo:

Ingresé a la Clínica ISSSTE Xalapa, al área de Urgencias, desde el día 24 de octubre de 2017 a causa de un accidente (caída de una azotea), donde se me atendió con medicamentos para el dolor y me tomaron radiografías, las cuales arrojaron luxación de hombro derecho y fractura de fémur de la pierna derecha; al día siguiente entré a quirófano para que me acomodaran el hombro y luego me pasaron a piso en la cama 29, donde lamentablemente me encuentro hasta el día de hoy, en espera de la operación de mi pierna.



Después de pasarme a piso se le informa a mis familiares y a mí que para la operación de mi pierna se requería un material que tardaba en llegar entre 3 y 5 días y que ya se había pedido a México, cuestión desmentida por personal de la delegación estatal, ya que el material tarda un día a más tardar 48 horas, salvo casos muy específicos que se tenga que pedir al extranjero. Pasó una semana y no me operaban ni se me informaba nada, pues “según se estaba en espera del material”, otra mentira pues éste nunca se solicitó, ya que para realizar mi operación los traumatólogos de la clínica concluyeron que se necesitaba la mesa traslucida que desde hace más de 3 meses está descompuesta, ¿entonces para qué la excusa de espera del material? (información que desconocía y me enteré después), aquí se perdió una semana por lo que mi esposa tuvo que preguntar por qué no me operaban y le dicen que no podían pues la dichosa mesa no servía y que iban a solicitar mi traslado a otra clínica.

El 31 de octubre mandan a mi esposa a sacar copias para solicitar mi traslado, a partir de ahí diariamente mi esposa preguntaba en el área de traslados, al principio le dijeron que la clínica de Veracruz y la de 20 de Noviembre en México dieron una negativa, luego referían que estaban en espera de la respuesta de la clínica de Puebla.

El viernes 3 de noviembre por la mañana mi esposa e hija conversaron con el director de la clínica Rubén Lince Molina, quien les comenta que la clínica estaba trabajando para arreglar la mesa traslucida y que probablemente el 8 de noviembre ya estaría lista para utilizarse, que estaban por confirmarle y quedó muy formal que ese mismo día les daba una respuesta, si me operaban en la clínica si la mesa iba a estar funcionando o de lo contrario él checaría con la clínica de Puebla para ver lo de mi traslado.



Pasó el día y esa respuesta nunca llegó, el sábado 4 y domingo 5 los médicos no dieron ninguna respuesta y el personal de Subdirección y Dirección no labora, por lo que fue hasta el lunes 6 de noviembre que mi esposa busca al Director para pedirle información y no lo encontró, pues se incapacitó, así que la hicieron pasar con la doctora Miroslava Lango Rivera quien quedó como subdirectora, ella le dijo que iba a ver el caso y que a medio día le tendría una respuesta, información que tampoco llegó, otra semana sin operarme.

El martes 7 de noviembre el subdelegado Gustavo Montero Olvera acudió a la clínica para hacer un recorrido, debido probablemente a que familiares del señor Gamaliel Suárez García llevaron a la prensa a la institución ya que también necesitaba una operación y no se la realizaban. Aclarando que debido a esto ya fue atendido en el CEM, cuestión que a mí se me ha negado.

De hechos repugnantes ese día mi familia y yo fuimos testigos, pues el personal del hospital sabiendo de la visita del Subdelegado montó todo un teatro armado en las camas del nosocomio, en mi caso por la mañana pasó una enfermera y me dijo que me iban a suspender la comida pues era probable que me operaran por la tarde, información falsa pues la mesa traslucida sigue hasta el día de hoy sin servir, sólo fue para que al pasar el Dr. Montero no me quejara.



Al señor Faustino Sandro Prado Landa internado junto a mi cama (28) con un diagnóstico de Cáncer de colon, le llevaron varios aparatos junto a él, los cuales retiraron inmediatamente el Subdelegado abandonó la clínica, además comentó su esposa que creía le inyectaron algo pues tenía las mejillas rojas, siendo que él señor desde que se internó y hasta que se lo llevaron mantuvo una cara desmejorada y pálida debido a que casi no comía y a su enfermedad.

Al señor de la cama 27, enfermo del pulmón, como no había ningún familiar con él, le dieron a firmar unos papeles según para hacerle unos estudios, cuestión prohibida por reglamento (que los pacientes firmen) los cuales no le practicaron, pero cuando el Delegado pasó por su cama y le preguntó cómo le estaban atendiendo, el inocente señor refirió que muy bien porque ya le iban hacer sus estudios.

A mi cama el Subdelegado no pasó pues lo sacaron, no sé si él estaba al tanto de esta confabulación y simulación o sólo los directivos y personal del hospital, pero resulta indignante percatarse de cómo se las gastan aquí para maquillar las cosas y jugar con la salud y vida de los pacientes.



El miércoles 8 de noviembre, la doctora Miroslava fue a verme y le expresé mi inconformidad por hacer ese circo conmigo si por la noche me dijeron que yo no estaba programado para operación, a lo que ella comentó que no sabía porque se había dado ese mal entendido, pero que ya estaba trabajando para darme una respuesta pronta para mi operación.

Mi familia y yo dimos un voto de confianza a la doctora, ingenuamente fuimos engañados, pues pasó nuevamente otra semana sin respuesta, por lo que mi hija decidió ir a la Delegación Estatal el miércoles 14 de noviembre, se dirigió a la oficina de la delegada pero al no encontrarla pasó al departamento del Subdelegado, en donde la atendió amablemente el doctor Hugo de Jesús Almazar Espejel, quien estuvo haciendo llamadas para conocer cómo estaba mi situación, puesto que en la clínica seguían aludiendo que estaban en espera de que Puebla aceptara el traslado, él se comunicó con el director de la clínica en Puebla y le pidió el favor de aceptar mi traslado, éste a su vez quedó de confirmarle.

Al otro día mi hija volvió a entrevistarse con el doctor Azamar en busca de una respuesta positiva, él le dijo que Puebla respondió que de acuerdo a la valoración de los traumatólogos de allá podían utilizar otro método para operarme sin necesidad de la mesa traslucida, así que el doctor se comunicó a la clínica de Xalapa y pidió que nuevamente los traumatólogos valoraran mi caso y definieran si podían operarme ahí sin esa mesa o de lo contrario agilizaran un subrogado; envió a mi hija por una respuesta con la Subdirectora ese mismo día. Así lo hizo y ésta le dijo que sus traumatólogos sólo podían hacer la operación si contaban con la mesa, así que quedó de ver que me operaran en el CEM o en el Civil, que se retirara y en un momento ella personalmente iría a darme una respuesta.



Fue hasta el otro día que mi esposa tuvo que ir a preguntar qué información tenía y le dijo el gestor Iván, encargado de los envíos subrogados, que el CEM se negó a recibirme y que el Civil les dio fecha de recibir pacientes entre el 27 de diciembre al 1 de diciembre. Para esto estábamos a 16 de noviembre, significaba una espera cerca de dos semanas más, por ende, mi hija el viernes 17 de noviembre se comunicó por la mañana al número 01 800 710 4666 de quejas del ISSSTE, en dónde escucharon la queja y le dieron el folio Ovtel-0005820/2017 a la inconformidad.

Ese mismo día por la tarde le devolvieron la llamada de ISSSTETEL y le informaron que se habían comunicado con la clínica de Xalapa con la doctora Miroslava y que ella refirió que se tenía como fecha probable de operación del 27 de noviembre al 1 de diciembre, lo mismo que ya sabíamos, y que no podían hacer más por el momento, ya que la institución no se estaba negando al subrogado, además apenas habían expuesto la queja.

Al día de hoy vuelvo a manifestar la necesidad de que se gestione mi operación para que se realice antes de estas fechas puesto que tiene más de una semana que se me está formando una úlcera por presión que supura mucho, debido a que mi pierna no tienen movimiento, y los médicos me piden que la mueva porque sino se me hará un orificio que por lo regular se infecta mucho, esto es una burla puesto que no puedo mover mi pierna para nada por la fractura, cada vez que pasan dicen que me van a aplicar una crema y ponerme una bolsa de agua y hasta ahorita no me han hecho nada, ayer lunes 20 de noviembre mi hija le recalcó al traumatólogo que pasó a verme que no fueran sólo palabras como días atrás y quedaron de llevarme la pomada en un rato más y nada, luego pasó la trabajadora social y volvió a insistir, ella quedó de ver esa situación sin ningún resultado.



Qué es lo que esperan los directivos de la clínica para cumplir con su trabajo, hasta dónde quieren llegar con tanta negligencia, mi familia está tan indignada con esta situación, por lo que sigue buscando los enlaces que puedan apoyarme y que sea operado lo antes posible, pues creo que ninguna persona merece permanecer los 28 días que llevo sin poder moverme o los más de 35 días que propone el ISSSTE, usando pañal y que la “bañen”, una limpiada con estropajo, cada 8 días, como me ha pasado, además me ha dado tos, diarrea y problemas de presión arterial; esto es denigrante y atenta contra mis derechos humanos.

A la presente anexó documentación e imágenes de la situación en la que me encuentro, cabe aclarar que en la hoja de traslado se maneja que tengo fracturado el fémur izquierdo cuando se trata del derecho, hasta el diagnóstico tiene errores, una prueba más de lo deficiente de la atención que se brinda en este hospital.

Sr. Martín Cervantes Hernández
A T E N T A M E N T E